En el 17 de octubre, Stara celebró una nueva edición de visita familiar. Por la tarde, la empresa abrió sus puertas a los empleados y sus familias para conocer la historia y el parque industrial de Stara.
Alrededor de 400 personas participaron en las actividades que se iniciaron con la presentación de la historia de Stara contada por Nicole Stapelbroek Trennepohl, miembro de la cuarta generación de la familia en la gestión de la compañía. Después se invitó a los participantes a visitar la estructura de la compañía, en los principales sectores, desde la programación de la producción hasta el montaje final de los productos.
«Llevar la familia en la fábrica es muy emocionante porque podemos mostrar donde trabajamos y los productos Stara. En la fábrica podemos tener una visión más amplia que no podemos mirar por fuera. Para la visita trajo primos y compadres», dice Carina Decker, colaborador el sector de TI. Nilton Petri, uno de los primos que vinieron en la visita Stara conocía solamente el lado de fuera. «Es muy bueno conocer la compañía. Sólo vio el por fuera su crecimiento, pero ver aquí el interior es muy diferente. Se imaginó una planta totalmente diferente, muy sorprendido», dijo Nilton.
El colaborador Vanessa Schreiner, el sector Compras, trajo el padre y la madre a visitar la empresa. «Estoy sorprendida. Cuando pasamos por la calle, no podemos imaginar cómo es por dentro. Nos encanta saber donde trabaja nuestra hija», dijo Solene, la madre de Vanessa. El padre, señor Alipio, estaba encantado. «Me pareció muy atractivo para visitar, sobre todo para conocer a las asambleas. Ni imaginaba cómo hacer tantas máquinas», dijo Alipio.
El pequeño Lucas llegó con su padre William Fiorese, la madre y los abuelos y se encantó con la visita. «Me gusta ver todas las máquinas, especialmente los tractores. Mi padre trabaja en medio de muchas máquinas grandes», dice Lucas. «Mi madre se mostró sorprendida por el tamaño de la empresa, dijo que se parece a una ciudad. Me siento muy orgulloso de trabajar en Stara y estoy muy feliz de mostrar mi trabajo a mi familia, para poder traer a mi hijo aquí» dice Guilherme.
La visita de la familia se lleva a cabo cada seis meses, con un momento de integración entre la empresa, los empleados y sus familias, lo que refuerza el sentido de familia Stara.